Acerca de la percepción

En 1962, el sociólogo Marshall McLuhan habló de la “aldea global”, como una expresión para referirse a un mundo cada vez más pequeño, gracias a que la comunicación cada vez es más ágil, razón por la que, empezaron a acortarse las distancias entre los habitantes de todo el planeta. 

Actualmente, las TIC y las redes sociales se han convertido en las principales herramientas en todos los ámbitos de nuestra vida cotidiana, porque gradualmente han desaparecido las fronteras físicas y hemos mundializado la música, la moda, la literatura, el deporte, el arte y todo aquello que tiene que ver con el quehacer diario de la sociedad. Tenemos casi todo al alcance de un clic, por ejemplo, desde nuestro ordenador podemos hacer trámites bancarios o gubernamentales, compras online, cursos académicos e incluso trabajos home office, sin duda, nos hemos convertido en una sociedad tecnologizada.

Frente a todos estos cambios sociales y tecnológicos, se está dando un fenómeno que afecta a la población de todo el mundo y es el hecho de que ahora pretendemos “universalizar” todas las ideas, criterios, formas de pensar y actuar. Cada día se suman a la fila, millones de personas hipersensibles que exigen tolerancia y respeto hacia sus creencias, gritan y levantan la voz, pero no aceptan que los demás piensen diferente. Son personas que defienden aguerridamente la lucha por la igualdad, la equidad y la tolerancia, sin embargo, no siempre están dispuestas a escuchar y mucho menos a reconocer que los demás ven el mundo desde una perspectiva muy diferente. 

El problema de fondo es que nos cuesta trabajo identificar que cada uno de nosotros ha sido educado en condiciones diferentes, en donde la familia, el contexto, las experiencias personales, los valores, la formación académica e incluso la inteligencia cognitiva de cada uno, marcan profundas diferencias al momento de enfrentar una situación determinada. Es absurdo pretender estandarizar pensamientos y comportamientos, porque cada persona tiene una personalidad diferente al resto del grupo. Todos miramos desde distinto ángulo y es totalmente normal, porque lo que vemos en el exterior es interpretado desde nuestros sentidos y nuestra experiencia personal.

Recibimos información sensorial, es decir, a través de nuestros sentidos acumulamos información que convertimos en conocimiento. No todos vemos y oímos lo mismo, porque los sentidos y la experiencia nos reportan información diferente. Por ejemplo, no todas las mujeres podemos pensar lo mismo acerca del machismo o la misoginia en el hogar, porque mientras que algunas mujeres crecimos y nos educamos en un hogar en donde el respeto, la igualdad y la equidad de género, han sido principios rectores para mantener la armonía y la unión familiar; en otros casos, las mujeres sufren todo tipo de violencia y discriminación por parte de la figura masculina. Estamos frente a dos situaciones que generan experiencias diferentes, por lo tanto, no podemos imponer un mismo pensamiento o creencia para todas las mujeres respecto de estos temas.  

La percepción es un proceso y actividad presente en todas las esferas de la vida, por eso, resulta imposible establecer criterios generalizados acerca de la belleza, la religión, la política o la tecnología, porque cada uno de nosotros opina, critica o reflexiona desde un pensamiento o experiencia personal y cultural. Las TIC y las redes sociales se han convertido en un foro en donde cualquier persona se siente portadora de la verdad, y expone temas que generan controversia y confusión, principalmente entre los niños y jóvenes. Un ejemplo muy claro, es el papel que tienen los influencers, ya que se dedican a transmitir información cargada de subjetividad, hablan de su “verdad” pero recordemos que toda opinión viene desde una vivencia personal y no significa que sea la realidad.

Es imposible establecer acuerdos desde la imposición porque, para lo que uno es bueno, para el otro puede ser que no lo sea. Decir qué música es la mejor, cuál es la mejor comida, qué religión es la verdadera, quiénes son buenos y quiénes malos, cuáles son los mejores lugares para viajar y de dónde son las mujeres más guapas del mundo, exhibe tan solo un punto de vista personal, pero no una realidad para todos. 

Recordemos que existen tantas realidades como personas en el mundo, porque la realidad personal es un constructo que parte de experiencias personales y sociales, lo cual significa que, pensar que los demás están mal solo porque no creen en lo mismo que nosotros, nos puede conducir a un sesgo de atribución y podemos cometer el error de estereotipar y obtener impresiones negativas acerca de los demás, y lo peor es que, estaremos perdiendo la oportunidad de conocer a personas fascinantes de las cuales podemos aprender nuevas formas de ver la vida. Si quieres conocer más acerca del tema comunícate con nosotros, tenemos cursos y talleres para ayudarte a crecer y posicionarte en el mercado.

Por Carmen Benavides, Directora de Contenidos, trainn mx

Contáctanos.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *